¿Alguna vez
pensaste que habías perdido el tiempo en algo o con alguien? ¿Alguna vez
piensas? O solo actúas, vives, respiras y ya.
Estoy
flotando, tomado de mi vaso caído y recostado sobre alas y la botella media vacía
que nada sale de ella porque no me dará más de beber.
Estoy destruido
pero creo saber recomponerme después de
todo esto es una batalla más, un hombre no participa solo en una pelea, si no
en varias. Si no, no es caballero y la espada, su propia espada debe
degollarlo.
Estoy desarmado
como si el rompecabezas enorme viniese sin armar y sin replica fotográfica de
lo que va. ¿Entonces como sabes por dónde empezar?
Después de
otro trago estaré mejor, dame mi pastilla para dormir como la bella durmiente, poseída
y envenenada esperando al lobo que nunca vendrá a despertarla, sigue flotando
por la casa, ahora en el hall abriendo la puerta de la calle, sigue por la calle,
por encima de los autos y el viento le lleva por donde tenga ganas de soplar.
Estoy vivo y
yo decido si quiero estar dormido. Voy sobre el techo del aquel auto azul y entrare
al volante, al mando comandante.
Te creías importante
intentando tirarte del balcón, llorando hasta las once en la habitación como un
bebé de pecho. Manipulabas mis manos y mis palabras. Ahora manejo yo.
Me voy, estaré
mejor sin ti, sin mí junto a ti porque conmigo ya es suficiente. No acarreo
carretillas de otros obreros ni termino trabajos de otros arquitectos.
La música suena
lento y lento voy bien. Sin beber voy mejor. Entonces ya no estoy loco por ti. Sabrá
disculparme estimado.