EMANCIPACION OF MY (Cap 4)

                                                        

Papá es el segundo hijo de 5 hermanos, tres varones y dos mujeres. Cuando nací nos mudamos al campo, papa ya era graduado de agronomía, una finca a 180 Km. de la capital un lugar magnifico, 250 hectáreas  pobladas de árboles de sauce ,pino y roble ya conformaban nuestro nuevo hogar. Todas las mañanas papá me levantaba cuando cantaba el gallo, era nuestro despertador  en el momento en que el sol se posaba sobre nuestras cortinas, el animal ya sabia que debía despertarnos para empezar a trabajar. No se porque razón pero cada mañana una araña Gigantesca se posaba en la puerta de ingreso a las habitaciones, como esperando que habramos la puerta, las primeras veces que la vi me daba mucho pudor, imagínese

que yo era muy pequeño, hasta que me fui acostumbrando y cada vez que la veía tomaba un palo y la aplastaba, ya era una costumbre, mi hermano también continuo haciéndolo cuando yo crecí, como si dicho proceso tuviese que seguirse por descendencia.

Recuerdo muy pocas cosas de mi niñez, yo tendría 3 años quizás, recuerdo que papá me subía a su tractor y me llevaba a cazar corderos. mientras avanzábamos a velocidad tortuga a lo lejos sobre la tierra color maíz, divise una serpiente, media casi 2 metros, entonces le dije a papá que la aplaste con la rueda gigante

del tractor,me respondió que de igual forma no moriría así. La serpiente se acurruco y tomó la forma oblicua de la rueda sin sufrir daño quedo mirándome después

que atravesamos sobre ella.

Dicen que un niño en edad preescolar recuerda solamente aquellas situaciones que han dejado marcas en su mente,el individuo no elige que cosas recordar en su adolescencia y que

otras no, es su cerebro que se encarga de mantener aquel recuerdo enfrascado y lo despeja años Despues cuando surge alguna situación parecida. es como un dejavu

es cuando creemos que a esto ya lo hemos vivido, y empieza a buscar en sus recuerdos si vivió tal situación antes o no.

Mis recuerdos se deben a eso, momentos compartidos con mi padre en el campo , arando la tierra , cazando animales, paseando en la maquina que ara la tierra. 

Con mama por ejemplo no recuerdo absolutamente nada, quizás ella se ocupaba de los quehaceres de la casa y como papá pensaba que quedarse entre las polleras de una mujer no es buena idea, me llevaba con el para aprender a ser un hombre. Solíamos regresar a las 13 porque el sol quemaba a mas no poder, no había sombrero que nos cubriese de las altas temperaturas, mamà nos esperaba con el ventilador prendido debajo del toldo en donde almorzábamos. Mi hermano dos años mas pequeño que yo era amamantado

pero papà lo sentaba con nosotros de igual forma, decía que en la mesa, a la hora de comer debíamos estar todos unidos, pudiésemos estar con 40 grados de fiebre que no interesaba.

Mas adelante a papa le surgió una propuesta para la familia, nos ofrecían mudarnos a una casa mas equipada, ya éramos tres hermanos y en la habitación en donde se dormía en la finca

cada vez se hacia mas pequeña. Había una escuela en la zona, supermercados y el hospital era el mas completo de la ciudad.

De la caza recuerdo solo que tenia un pasillo sin techo que daba salida a la calle y paralelo a este estaban las casa de los vecinos, a diez minutos había un río en donde se podía pescar mojarritas, un pez pequeñito que se come salteado con sal y limón. El patio no tenia medianera, ninguna pared que resguarde un poco tu intimidad, cuando salís a tender la ropa salen tus vecinos también , como si hubiese un horario para hacer la cosas , como mama solo se ocupaba de nosotros trataba de salir al patio cuando ambos vecinos no estaban, al ser nuevos en el barrio todos se empecinan por sacarte información, que de donde vienen , porque a esta ciudad y si Ud. es casada también.

Mama con el paso del tiempo hizo dos amigas, inevitablemente la vecina del al lado, que tenia 7 hijas mujeres, todas seguidas de edad y ninguna asistía a la escuela.Se llamaba Lola y era viuda, vivían de la ventas de pan casero que amasaba todos los días, cada mañana mandaba a María en la bicicleta a repartir los pedidos a todos los vecinos que tenia como clientes fijos.

De el lado izquierdo teníamos a la Sra. porota, nunca supe cual era su nombre verdadero, ella tenia una despensa, su marido trabajaba en la finca, en la parte de las bananas conocida como el bananal. Porota tenia dos hijos mellizos, un hombre y una mujer de unos 25 años en ese momento, ellos se ocupaban de atender

el negocio, rara vez tenían ventas porque los precios estaban muy caros a comparación de los del supermercado que quedaba a 60 km. además tener las góndolas vacías era costumbre del negocio, lo que si abundaba eran las golosinas. En el barrio tenia un solo amigo de mi edad solíamos jugar a las escondidas por la mañana hasta la hora del almuerzo o hasta que llegara papà. Por la tarde en casa se dormía la siesta obligatoriamente, era algo que yo en verano detestaba hacer. 

Dentro de la habitación la temperatura era agradable pero nunca pegaba un ojo porque mi ventana daba a la calle y se oían claramente como jugaban los otros niños futbol en la calle.

Yo solía contarle a Juan, uno de los mellizos que odiaba hacer siesta y que me aburría por las tardes entonces el me propuso llevarme a pescar al río que quedaba a tres.

cuadras de casa. Una tarde estábamos almorzando y Juan llamo a la puerta, hablo con mama para pedirle permiso para llevarme a pescar justo en el horario de la siesta, mamà y papa estuvieron de acuerdo entonces prepare mi pantalón corto y mis alpargatas, me puse un sombrero de gaucho y salí corriendo hacia la puerta donde Juan ya estaba esperándome con dos cañas de pescar.

Recuerdo que le agradecí llevarme de paseo, llegamos caminando, lo primero que teníamos que hacer era buscar carnada para pescar, me indico que en aquella esquina

había fango muy rico en nutrientes y que allí estaban las uncas perfectas para usar de carnada, yo debía cavar con las manos hasta lograr encontrar al menos cinco gusanos vivos que después se partían en tres pedazos y se incrustaban en el anzuelo.

Verdaderamente fui el ganador de esa tarde, había conseguido cuatro piezas más que Juan, estaba muy contento. Eran las seis de la tarde y el calor aun estaba en nuestras espaldas, me pregunto si me quería sumergir en el agua fresca del rio, sobre la parte mas baja, donde no hay corriente. Juan se quito la remera y se metió primero, el agua le llegaba a la cintura, yo calculaba que ami me llegaría hasta el pecho pero no me asustaba. sentís como se posan los peces en tus piernas ? me dijo.

si respondí, es como que quieren comerte a pedacitos, me tomo de la mano, me llevo junto a el diciéndome que en donde el estaba parado habían peces de colores entonces fui hasta ese lugar pero el agua ya llegaba hasta mi cuello, tenia la sensación que me resbalaba porque el barro te succionaba, entonces le extendí la mano para que me ayudase y al tomarme me puso dándole la espalda, Me tomo de la cintura, acaricio mi piel blanca , junto agua con sus dos manos y mojo mi cabello color oro, escuche que susurraba cerca de mis oídos, pero no lograba entender muy bien. Bajo lentamente mis pantalones, me toco desde arriba hacia abajo, me beso el pezcueso, me volvió a tocar , se éxito, me pregunto si me gustaba, me soltó por completo y me volvió a tomar como si fuese una carta de póker, llego a penetrarme y mientras lo hacia tarareaba alguna canción en otro idioma que nunca olvidare. 

Tenía  casi cuatro años y no estaba conciente de la gravedad del hecho, solo se que caían la lagrimas al abrir y cerrar los ojos. Llegamos a casa al rededor después que se perdió el sol, toco la puerta y me entrego como un paquete a mama, hasta mañana se escucho.

Me visito mi vecino que hace días que no lo veía porque estaba enfermo, trajo unos dibujos para colorear que hizo mientras estaba haciendo reposo. Después dimos una vuelta por el parque y caí sobre

el barro y volví inmediatamente a casa a bañarme antes que mama me descubra, escondí toda la ropa sucia y volví hacia la sala que Pablito me esperaba mientras veía una serie de TV, entonces llaman a la puerta y antes que atienda se asoma Juan por la ventana, creí que me desmayaba, empecé a descomponerme, me puse muy nervioso y hasta tenia miedo , ese miedo que le tengo a papa cuando se enoja.

A- Que están haciendo pregunto Juan

B- Estamos jugando

A- Puedo pasar ?

B- No, porque la puerta esta cerrada con llave y mama se la llevó

A- Esta bien, vuelvo después

Corrí de inmediato al baño, recuerdo que abrí el grifo de agua fría y zambullí la cabeza, mis lagrimas se mezclaron con el agua dulce, había algo extraño en mi cuerpo que

no me dejaba respirar, estaba entrando en un ataque de pánico, me senté y respire profundo hasta componerme.... continuara